dimecres, 1 de juliol del 2009

CALDO DE CULTIVO MAGAZINE (RIESGO GRÁFICO Y LITERARIO) : Nº 4, JUNIO DE 2008

SPECULATOR SOMOS TODOS (UN PROYECTO DE : TODO POR LA PRAXIS)

En 1999 se constituyó el colectivo Todo por la Praxis. Sus miembros, procedentes de áreas de actividad teórica de lo más heterogéneo, se organizan como un intelectual colectivo y un sujeto político activo: un constante Laboratorio de proyectos que funciona como agente transformador dentro del campo simbólico de las prácticas artísticas. Todo por la Praxis se define como un Laboratorio productor-amplificador de proyectos estéticos de resistencia cultural. Un Laboratorio que ofrece herramientas para la intervención sobre el espacio público urbano, siempre con el objetivo de crear una Praxis activista y de oposición.


La acción de TxP se concentra en el ámbito urbano, la esfera pública y el mercado inmobiliario, intentando siempre generar espacios de oposición a las estructuras de dominación, proponiendo estrategias de expropiación del espacio ciudadano. El objetivo último es desenmascarar los procesos de especulación, gentrificación, mecanismos de segregación urbana y dispositivos de control social.

Para ello surge Speculator, personaje ficticio que se apropia de la iconografía del cómic estadounidense más tópico, de esos súper-héroes de Marvel o DC que funcionan como referentes morales para los lectores, erigiéndose como un anti-héroe cuya personalidad se encarna en una acción fundamentalmente amoral: la especulación inmobiliaria. Speculator subvierte así el clásico maniqueísmo "bien-contra-mal" del cómic desde la ambigüedad, pues la acción que debe cometer es despertar conciencias y revelar una verdad incómoda: que todos somos potenciales especuladores, siempre y cuando poseamos una propiedad inmobiliaria, por ínfima que sea.


Speculator es un con-individuo con una particularidad: no esconde su identidad; la propaga. Esta singularidad múltiple se hace efectiva gracias a su valor simbólico, pues se convierte en una máscara que facilita la subversión y reapropiación del código ideológico preestablecido en la especulación inmobiliaria.



Luego, todos somos Speculator, pues su identidad refleja a todos y cada uno de los innumerables especuladores del estado español, surgidos de una "democratización" del mercado inmobiliario que ha normalizado la especulación hasta convertirla en una práctica asumida e incuestionable. En todas las capas sociales se pueden encontrar con facilidad ciudadanos que han multiplicado su nivel de renta gracias a una especulación anónima. Poseían un inmueble pequeño, de mínimo valor, incluso en vecindarios de renta baja, que llegado un momento las circunstancias del mercado revalorizan hasta el absurdo. Simplemente conformándose con la situación creada, su nivel de renta puede crecer desorbitadamente, y, es obvio, con ello también sus condiciones de vida.
Queda claro que rebelarse está demás.


El resultado es una sobrepoblación de especuladores imposible de detectar, y por tanto, de atacar. Ante este desenfreno, surge Speculator como una carcajada que brota de la misma simultaneidad y del mismo anonimato que el fenómeno especulador. Desde la informidad de lo múltiple, la parodia se extiende en todos y cada uno de nosotros, anónima e invisible. Es la única manera de atacar: mostrando lo grotesco de un enemigo que puede encarnarse en nosotros mismos.

Speculator es el reflejo de nuestra miseria espiritual, pues nos recuerda lo ilimitado de nuestro materialismo.

Speculator nos ofende con la deferencia de la superioridad económica.

Speculator nos indigna con su evidente corrupción.

Speculator supera la ficción y se inserta en la memoria cotidiana.

Speculator somos todos.

Article aportat per VEI

1 comentari:

jordi ha dit...

És evident que el mal de l'especulació no sólament és culpa de la classe política i empresarial, sinó que ho portem tothom a la nostra sang amb els plantejaments capitalistes que ens han adoctrinat per tot arreu -escola, treball, televisió, premsa,...-. No tenim remei.