Martes , 02-02-10
La concejal de Ciutat Vella, la independiente Itzíar González, se encontró varios marrones sobre la mesa (por así decirlo) cuando asumió el cargo al inicio del mandato: uno de ellos era el Plan de Reforma Interior de la Barceloneta (PERI), más conocido como Plan de Ascensores, un ambicioso proyecto que pretendía dotar de elevadores a 5.000 viviendas de un barrio dominado por los llamados «quarts de casa» y que tres años después de su aprobación puede considerarse como un plan fallido.
Tan ambicioso y osado como mal explicado, el PERI tuvo que ser reformulado ante la oposición frontal de parte de los vecinos, cuyo movimiento asociativo quedó fracturado entre posibilistas, capitaneados por Àngels Simarro, y frentistas, estos representados por la recientemente fallecida Emilia Llorca.
La posibilidad de que una comunidad de propietarios acordase la «expropiación» de un piso por planta para instalar un ascensor sublevó el barrio marinero, con lo que la concejal González, a quien los vecinos reconocen predisposición y actitud dialogante, tuvo que reformular el proyecto, endurecer las condiciones de expropiación y apostar por el microurbanismo y el estudio escalera a escalera, piso a piso.
16 millones
Sin embargo, a un Plan de Ascensores rebajado en ambición se sumó luego un nuevo paquete de ayudas al incluirse la Barceloneta como uno de los proyectos de la ley de Barrios de la Generalitat, 16 millones de inversión a aplicar de manera más flexible y que meses después empiezan a dar sus primeros frutos.
La concejal González explicó ayer son ya tres las comunidades de vecinos que han empezado obras de mejora de los edificios, que la administración cubre en un 60 por ciento. Según el Ayuntamiento, 68 escaleras han solicitado información, la mitad de ellas han iniciado los trámites y 17 ya han hecho el estudio de viabilidad. Con bloques con los elementos comunes muy deteriorados, algunos todavía con corriente a 125 vatios y agua de deposito, la Barceloneta comienza tímidamente a ponerse guapa.
Mientras que la ayudas del Plan de Barrios están empezando a llegar, el reformulado Plan de Ascensores sigue encallado, en lo que muchos denuncian ya que es la antesala de su fracaso definitivo.
Ante esta situación, la portavoz vecinal Àngels Simarro, considera que es necesario dar un nuevo impulso, empezando por la construcción de los pisos que al lado de la Estación de Francia deben acoger a los realojados por las reformas del PERI. Si los vecinos ya denunciaron que estas viviendas se redujeran de 180 a 120, ahora ven como las únicas que se construyen son las que promueva la iniciativa privada, denuncia Simarro.
Publicat diari ABC
Publicat diari ABC
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada