dimarts, 19 de gener del 2010

Inmobiliarias, inversores y bancos ya acumulan más de 3 millones de pisos

El empacho de ladrillos durará siete años más. La comparación entre la oferta –1,67 millones de viviendas– y la demanda –218.400 compradores– "determina unos stocks de viviendas nuevas vacías puestas a la venta", tan enormes que no se podrán drenar por completo hasta 2016.

Así lo argumenta el Anuario Estadístico del Mercado Inmobiliario Español 2009 de la consultora R. R. de Acuña & Asociados, presentado ayer.

Esa indigesta “sobreoferta” se suma a las 327.350 casas en promociones paradas sin terminar, así como las viviendas no iniciadas con proyecto, que ya suman 1,098 millones de unidades. Éstas se deberán ir acometiendo en los próximos dos años, y tienen un crédito otorgado que asciende a 52.947 millones de euros, según las estadísticas de la consultora. En total, inmobiliarias, bancos, cajas de ahorros e inversores particulares soportan un peso de casi 3,1 millones de viviendas.

Además, el suelo residencial acabado, en promoción o gestión de las inmobiliarias alcanzaría para edificar 869.122 casas, y el de la banca 160.000.

Una losa que difícilmente se quitarán de encima, ya que, como subrayó Fernando Rodríguez y Rodríguez de Acuña, presidente de la consultora, ayer, en el sector inmobiliario “de brotes verdes, nada”.

Rodríguez señaló, además, que “hasta 2011 el precio de la vivienda caerá de media un 22%” adicional. Y tampoco “ha pasado lo peor”, como señaló Zapatero por la mañana. El punto más bajo del deterioro se registrará “en el segundo semestre de 2010”.

Según el estudio, el efecto de la depresión del ladrillo sobre el PIB no es “instantáneo”, pero la economía española caerá un 4,6% en 2009, un 4,3% en 2010, un 1,8 % en 2011 y un 0,5% en 2012. Y en 2013 crecerá un 1,1%.

Otra de las principales conclusiones es que el 75% de las empresas constructoras dedicadas a la edificación de inmuebles residenciales desaparecerá en los próximos cinco años, debido a su alto endeudamiento, a la caída de sus ingresos por el descenso de las ventas y a “su mala gestión”.

Es algo que ya adelantó Rodríguez en una entrevista con EXPANSIÓN hace más de un año, el 27 de junio de 2008. Entonces cifró la sangría en el 80%. Teniendo en cuenta la gran cantidad de concursos de acreedores que han acontecido desde dicha fecha, la nueva cifra no hace sino aumentar el pesimismo.

Todo ello repercutirá en el empleo, de forma que entre 2007 y 2010 se destruirán 1,65 millones de puestos de trabajo, hasta reducirse a la mitad el peso de la construcción en el empleo total, hasta el 6,3%.

Pero no sólo las empresas están al borde del endeudamiento máximo. Según el anuario, los hogares españoles son los segundos de la zona euro que soportan una mayor ratio de crédito sobre PIB (un 80,7%), sólo por detrás de Chipre (113%). La media de la zona euro es del 52,9% del PIB. Así, “es muy difícil que los hogares se puedan endeudar más”, apostilló Rodríguez.

El Congreso aprueba el plan de alquiler de CiU
El Congreso de los Diputados aprobó ayer una proposición no de Ley de CiU para impulsar la creación de un gran parque de viviendas de alquiler a un precio máximo de 375 euros al mes, mediante un sistema de colaboración entre el sector público y el privado.

El texto, que contó con el apoyo parlamentario del PSOE y del PNV, estudia construir viviendas para un alquiler low cost sobre suelo público mediante una fórmula mixta por la cual la constructora gestionará los alquileres, mientras que la entidad pública garantizará el cobro de los mismos.

Así, según explicó el portavoz de vivienda de CiU en el Congreso, Pere Macias, los promotores no tendrán que comprar el suelo, sino que los propietarios de estos terrenos cederán el derecho de uso durante un periodo de 10 a 25 años. Los arrendamientos darán poca rentabilidad, pero las operaciones serán beneficiosas para los constructores, ya que permitirán incluir en la concesión parkings y locales comerciales, que dan márgenes apetecibles.

Publicat en Expansión