divendres, 16 de gener del 2009

La oposición vecinal rebrota en Barcelona

Cuando se cumple año y medio del actual mandato municipal, el alcalde Jordi Hereu se enfrenta a problemas vecinales, en su mayoría relacionados con el reordenamiento urbano, en muchos de los distritos de la ciudad. Por ejemplo, la recalificación propuesta por el Barça en Les Corts, el plan de mejora del Carmel y la montaña rusa del Tibidabo, puesta en marcha la pasada Navidad. Fuentes del equipo de gobierno consideran que son cuestiones baladíes, pero no todo el mundo lo ve igual. Eva Fernández, presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, estima que son problemas que rebrotan cíclicamente porque el Consistorio no los acaba de cerrar. "La crisis ha puesto en duda un modelo de ciudad megalómano y de crecimiento urbanístico sin límite. Ahora hay que dar solución a los problemas de las personas afectadas por la crisis", sostiene Fernández.
El alcalde y el teniente de alcalde de Urbanismo, Ramon García-Bragado, mantuvieron el jueves pasado una larga reunión con Fernández para repasar problemas de la ciudad. Joaquim Forn, de CiU, avisa que muchos de los casos están "enquistados" y reflejan la incapacidad del bipartito para dialogar: "Su modelo de ciudad está agotado. Ahora van a nombrar secretarios técnicos (uno por cada uno de los 73 barrios) en los distritos, que serán comisarios políticos". Éstos son algunos de los conflictos.

Llegir article

1 comentari:

Anònim ha dit...

Está muy bien el artículo.

respecto a la conferencia de Hereu, resulta insultante el lema de "contra la crisi, més Barcelona". Es como considerar idiotas a los habitantes de la ciudad usar un eslogan así, cuando la situación es insostenible y la gente va con el agua al cuello (o l'aigua al coll:). Un eslogan populista no sólo no salva de la cotidianeidad asfixiante en la que nos han hecho vivir los políticos-empresarios; sino que en este caso ni siquiera anestesia mediante el efecto placebo de la construcción de una identidad.

Nos han robado la ciudad y resulta cada vez más difícil orgullecerse de pertenecer a la Barcelona construida por las instituciones que pisotea la Barcelona esborrada de las luchas urbanas y de la gente que habitaba en Barcelona.

No sé cuánta gente alardea de vivir en un parque temático, y sin embargo, no puedo quitarme de la cabeza la frase de "cada pueblo tiene el gobierno que se merece". No sé si quien pronunció la frase estbaa equivocado o si estamos haciendo algo mal desde aquí abajo.

En todo caso, lo que sí que tengo claro es que el eslogan "contra la crisi, més Barcelona" lo único que hace es demostrar una debilidad e incapacidad por parte del Ayuntamiento de hacer frente a la realidad y de reconocer esos errores cometidos a consciencia que les harían perder la cuota de poder a la que están bien aferrados.

Espero que la oposición vecinal y de otros colectivos consiga relamente evitar esa conversión en parque de atracciones terrorífico hacia el que nos llevan PSC e ICV. Sino, dentro de nada para ir al curro tendremos que coger el túnel del terror de gaudí; o pasear por el laberinto de los espejos cóncavos de la illa robadors.